Cultivamos el respeto por los campos y las personas con el objetivo de valorar la armonía entre la naturaleza y los seres humanos, siempre protegiendo la sostenibilidad ambiental, económica y social. Las plantas son seres vivos dentro de un ecosistema y los frutos no son solo productos, sino también comida destinada a la mesa de quien la consume.
Graper cultiva y actúa éticamente en línea con las megatendencias de la Agricultura 4.0 guardando la armonía con el medioambiente.
Los valores
6 principios éticos
Hoy en día, trabajar con la naturaleza quiere decir necesariamente cuidarla y protegerla respetando una visión ética y sostenible. La atención a la tierra pasa por escuchar, contemplar y promover la belleza de la naturaleza.
Escuchar y
observar
En la naturaleza es importante escuchar y observar para entender las necesidades de la tierra: desde la consistencia del suelo hasta el color de las hojas y, aún, el estrés hídrico. Sin embargo, la atención tiene que dirigirse incluso hacia el exterior. En una sociedad en la que la información se comparte en las redes sociales, la voz de la autoridad pierde su valor. Es fundamental adoptar una estrategia para reforzar la propia autoridad y arrojar luz a la verdad.
Perseguir la
innovación
En los próximos años, se multiplicarán las ocasiones de inversiones a favor de avances ecológicos, en particular en el uso del digital: la declinación de la transición digital en la agricultura está todavía por descubrir. Además, debido a la progresiva disminución de obreros especializados, asistiremos al aumento de la robotización y de mano de obra extranjera. El reto del digital es dar rápidamente la bienvenida a nuevos interlocutores con los que crecer.
Educar en la amabilidad
y al respeto
La naturaleza nos enseña a ser humildes, a respetar sus tiempos y a valorar lo que podemos tocar con la mano. Cada vez que cometemos actos violentos contra la naturaleza, las consecuencias son siempre destructivas. Por eso es fundamental educar a la amabilidad y al respeto por el medioambiente, siempre teniendo presente que cada acción se coloca dentro de un sistema ambiental, económico y social complejo.
Comida de mesa,
no solo productos
El mundo del consumo está prestando especial atención a la calidad de los productos, aunque entender la verdadera calidad está al alcance de unos pocos. Para obtener una calidad alta hace falta analizar el producto como comida que acabará en la mesa, aún antes que como simple producto. Y ya que las calidades más fácilmente perceptibles se reconocen en la seguridad alimentaria y en los sabores, es necesario conservar el producto intacto durante la postcosecha.
Las plantas viven
dentro de un ecosistema
Con demasiada frecuencia nos enfocamos en la fría teoría y, como resultado, las plantas son tratadas como un medio del que sacar el máximo de su potencial.
La verdad es que las plantas son seres vivos dentro de un ecosistema, igualmente viviente, que hay que respetar en sus reglas y tiempos. Tener en cuenta todos los elementos de un ecosistema quiere decir obtener siempre plantas sanas y productos de excelentes calidades organolépticas.
Cutlivar
la belleza
Contra la percepción colectiva del mundo rural, para nosotros en Graper, agrícola no es sinónimo de bruto. La idea de belleza no debería entrar en conflicto con el mundo de la agricultura. Con vista al creciente turismo rural, es prioritario curar la belleza de los campos y de los productos para invitar a siempre más gente a conocer el encanto del campo y el estilo de vida agrícola. Se empieza por pequeñas medidas más inclusivas que hacen la diferencia, como no rociar los campos el domingo por la mañana para que los ciclistas puedan pasar por los caminos rurales.
Escuchar y
observar
En la naturaleza es importante escuchar y observar para entender las necesidades de la tierra: desde la consistencia del suelo hasta el color de las hojas y, aún, el estrés hídrico. Sin embargo, la atención tiene que dirigirse incluso hacia el exterior. En una sociedad en la que la información se comparte en las redes sociales, la voz de la autoridad pierde su valor. Es fundamental adoptar una estrategia para reforzar la propia autoridad y arrojar luz a la verdad.
Perseguir la
innovación
En los próximos años, se multiplicarán las ocasiones de inversiones a favor de avances ecológicos, en particular en el uso del digital: la declinación de la transición digital en la agricultura está todavía por descubrir. Además, debido a la progresiva disminución de obreros especializados, asistiremos al aumento de la robotización y de mano de obra extranjera. El reto del digital es dar rápidamente la bienvenida a nuevos interlocutores con los que crecer.
Educar en la amabilidad
y al respeto
La naturaleza nos enseña a ser humildes, a respetar sus tiempos y a valorar lo que podemos tocar con la mano. Cada vez que cometemos actos violentos contra la naturaleza, las consecuencias son siempre destructivas. Por eso es fundamental educar a la amabilidad y al respeto por el medioambiente, siempre teniendo presente que cada acción se coloca dentro de un sistema ambiental, económico y social complejo.
Comida de mesa,
no solo productos
El mundo del consumo está prestando especial atención a la calidad de los productos, aunque entender la verdadera calidad está al alcance de unos pocos. Para obtener una calidad alta hace falta analizar el producto como comida que acabará en la mesa, aún antes que como simple producto. Y ya que las calidades más fácilmente perceptibles se reconocen en la seguridad alimentaria y en los sabores, es necesario conservar el producto intacto durante la postcosecha.
Las plantas viven
dentro de un ecosistema
Con demasiada frecuencia nos enfocamos en la fría teoría y, como resultado, las plantas son tratadas como un medio del que sacar el máximo de su potencial.
La verdad es que las plantas son seres vivos dentro de un ecosistema, igualmente viviente, que hay que respetar en sus reglas y tiempos. Tener en cuenta todos los elementos de un ecosistema quiere decir obtener siempre plantas sanas y productos de excelentes calidades organolépticas.
Cutlivar
la belleza
Contra la percepción colectiva del mundo rural, para nosotros en Graper, agrícola no es sinónimo de bruto. La idea de belleza no debería entrar en conflicto con el mundo de la agricultura. Con vista al creciente turismo rural, es prioritario curar la belleza de los campos y de los productos para invitar a siempre más gente a conocer el encanto del campo y el estilo de vida agrícola. Se empieza por pequeñas medidas más inclusivas que hacen la diferencia, como no rociar los campos el domingo por la mañana para que los ciclistas puedan pasar por los caminos rurales.